martes, 28 de febrero de 2017

Unidad 5: El historial del centro

Mi centro es un colegio bilingüe del centro de Madrid. El tipo de alumnado es de clase media y algunos alumnos de clase media-baja o incluso baja. Por motivos varios, se decidió no trabajar con libro y aventurarse en la creación de nuestro propio material. Teniendo en cuenta que es un centro bilingüe, la metodología que algunos de nosotros aplicamos en la enseñanza de la sección en inglés es CLIL. Rápidamente, esta metodología, enseña contenidos en una lengua extranjera o la materna a la vez que se aprende un lenguaje mediante el constructivismo. No me quiero desviar de la cuestión, porque es un tema que daría mucho de qué hablar, y sería interesante que tanto profesores de la sección bilingüe como de la sección castellana, utilizara esta metodología para así aprender de esta manera, dos lenguas correctamente. No quiero entrar en la polémica del bilingüismo sí o no, o como está llevándose a cabo, sí es una cuestión política o no, pero lo cierto es que tras realizar varios cursos sobre CLIL, creo que es una aportación muy positiva al panorama educativo.

El hecho de no tener libros supone un trabajo adicional, que yo personalmente, estoy encantada de hacer, puesto que me da mucha libertad para enseñar el currículo. Me ha permitido salir de ese enfoque de enseñanza más tradicional que me tenía atada a pasado y que ha hecho que me sienta totalmente obsoleta en cuestión de años. Por otro lado, no permite un minuto de descanso y apenas permite un minuto de improvisación.

El ABP como tal no se aplica en mi centro, puesto que no todo el mundo tiene formación para ello, pero, somos varios los que estamos enfocando nuestro aprendizaje contínuo en este aspecto para poder enriquecer así nuestra docencia. Las compañeras de infantil sí trabajan por proyectos, pero no es ABP. Varias veces he podido intercambiar con ellas opiniones y perspectivas que ayudan a abrir la mente a nuevas experiencias.

Teniendo todo esto en cuenta, creo que el centro sí permitiría la aplicación del ABP, siempre que los compañeros tuvieran interés y formación en el asunto, y además en la sección bilingüe combinándolo con CLIL, que particularmente, me está resultando muy atractivo y me está dando resultados muy positivos. No obstante, no nos podemos olvidar que además de la estructura y organización del centro, hay que tener en cuenta otros aspectos que interfieren en el día a día de un centro y que ayudan o dificultan para la implantación de nuevas metodologías.

Reto 4: Evaluación.

Esta semana (bueno en realidad ya hace dos), dentro de las tareas de la unidad se pedía realizar una introspección personal sobre el tema de la evaluación, cómo, cuándo, quién, qué, incluso dónde. Así que como si de periodistas se tratase nos hemos puesto a pensar en todo este asunto para poder llegar al meollo de la cuestión, es decir, cómo vamos a afrontar la evaluación en nuestro proyecto. ¡Horror! Vamos, me ha alegrado leer las reflexiones de los compañeros, y comprobar que efectivamente, es uno de los aspectos de nuestro trabajo que más quebraderos de cabeza produce. Por otro lado, he comprobado, que hay auténticos profesionales en la materia que tienen las cosas muy claras y muy organizadas. Yo creo que me puedo situar en un punto medio, pero tengo claro que tengo que seguir mejorando en este aspecto. En fin, que si queréis leer mis conclusiones están en la entrada anterior.

A lo que iba hoy, que se me va la especie. Dentro del reto de esta semana, había que plantear una rúbrica del proyecto y una línea del tiempo explicando qué, cómo y cuándo realizaremos la evaluación durante el proyecto. Os las dejo por aquí:
  1. Rúbrica trabajo individual.
  2. Rúbrica trabajo cooperativo.
  3. Rúbrica dramatización.
  4. Línea del tiempo.
La línea del tiempo la he realizado con PowerPoint. Espero que se entienda claramente en qué momentos a lo largo del proyecto se pretenden realizar las distintas fases de la evaluación y cómo. También, me gusta utilizar unas rúbricas bastante generales que me permitan usarlas una y otra vez independientemente de las actividades o temáticas trabajadas. Tal y como dije en la introspección, no soy muy partidaria de realizar exámenes que ayuden a los chicos a aprender memorísticamente y que prefiero el registro diario de la realización de las actividades. También por aclarar, este año estoy trabajando con una clase de primero, y someterles al tipo de presión que supone una prueba, no me gusta mucho. De esta manera, suelo tomar nota bastante a menudo de las actividades que realizan los chicos para poder ser así lo más justa posible.

Espero que la tarea haya quedado clara, y no obstante, siempre están los comentarios para poder seguir mejorando.

PD: Creo que hay un problema con la línea del tiempo, parece que no se puede ver bien. Si alguien me lo puede confirmar, lo agradecería. 

martes, 21 de febrero de 2017

Evaluación: actividad de introspección.

Estamos con la unidad 4 del curso abpmooc_intef y tenemos que realizar una reflexión sobre nuestras prácticas de evaluación.

La verdad es que me ha resultado tranquilizador, leer a compañeros en twitter que hablan sobre cómo es la evaluación, la parte de nuestro trabajo que menos les gusta. Desde el principio de mi carrera profesional, me parece que una de las labores más tediosas que tenemos que realizar. Tal vez será por el hecho de tener que juzgar a los alumnos, por como se está complicando este aspecto mediante inspecciones, registros y demandas sociales (todos tienen que aprender unos mínimos), familiares (¿cómo has evaluado a mi hijo/a?), políticas (informe PISA, pruebas externas y demás)... En fin, que me parece una locura.

En cursos y centros anteriores, me he encontrado de todo: desde que debemos registrar diariamente los logros de la chavalada, a pasar un pequeño examen al final de cada unidad, un examen complejo, alguna vez trabajos en grupo... He de decir, que para esto siempre me he coordinado mucho con mis compañeros de nivel, y acordábamos por mayoría. No quiere decir que sean las soluciones que más me gustan. De hecho, hacer exámenes cada cierto tiempo me parece frustrante. Estoy de acuerdo hasta cierto punto, en que los alumnos mejoraban su expresión escrita, se les prepara para un futuro, tienen que aprender a controlar los nervios... pero en el fondo me preguntaba que ¿para qué? La sociedad no demanda esto, no nos lleva por ahí y seguir con un sistema tradicional de evaluación (y aprendizaje) es tener unos objetivos muy limitados y acomodados.

En la actualidad, con mis alumnos de 1º de primaria: sigo fiel a la observación diaria y registro de logros, las preguntas son cortas, y realizadas al azar mediante CLASS DOJO y tomo nota de los resultados. Utilizo rúbricas para evaluar la consecución de los estándares de aprendizaje. Y como ya he dicho en varias ocasiones, este año, al empezar en un centro nuevo, con una nueva metodología, y sin libros, no estoy realizando exámenes (sí, he llegado a hacer exámenes en primero porque era el acuerdo de nivel).

Por el momento, en mi aula es el docente el que evalúa. Doy las clases en inglés y me resulta complejo explicar a mis alumnos que tienen que reflexionar sobre sus tareas y realización por escrito. Sí que es cierto, que cuando me entregan trabajos que pueden realizar con mejor calidad, les hago pensar sobre como pueden mejorarlo, pero no utilizamos sesiones ni actividades exclusivamente a ello. Me gustan, y más adelante las pondré en práctica. Un recurso fácil que tengo en mente para el próximo trimestre es este. No lo he puesto aún porque son pequeños y tienen la costumbre de jugar y entretenerse con cualquier cosa y esta sería una de ellas, así que cuando tengan las rutinas más asimiladas podremos introducir este pequeño elemento con el cual me resultará más sencillo saber cómo se siente cada alumno a la hora de afrontar una tarea. 

Para mí es esencial tener claro que en la era de las comunicaciones, cuando cualquier cosa se puede consultar tanto en internet, como en los libros, la evaluación tiene que llevarnos a saber hacer, a saber ser independientes en nuestra formación y ser autónomos. De pequeña me llamaba la atención que una persona pudiera ser autodidacta, me parecía muy lejano, sin embargo, creo que es algo sencillo siempre que dotemos a nuestros alumnos de herramientas que les ayuden a ser independientes para que se formen sobre aquello que más les motive o interese. Creo que es por ahí hacia donde tenemos que tirar, junto con el trabajo en equipo y como no, los proyectos.

lunes, 20 de febrero de 2017

TIC para el ABP (2)

Os dejo por aquí las herramientas TIC que creo que me vendrán bien utilizar para las diferentes fases del proyecto. Como presento esta imagen con retraso he podido ver algunas herramientas que han presentado los compañeros y que no conocía. Ya están apuntadas en la lista de cosas en las que ponerse al día. Personalmente, me ha gustado mucho el vídeo de STOP MOTION, el de ONENOTE y TRELLO. Creo que podré sacarle alguna utilidad a todo esto, pero poquito a poquito.

Os dejo la imagen para que podáis echarle un ojo.

sábado, 11 de febrero de 2017

TIC para el ABP

Tras autoevaluarme utilizando la rúbrica de conecta13, he obtenido un resultado de 37 de 40. Una grata sorpresa para mí teniendo en cuenta que creo que estoy quedándome un poco atrás con estas cosas, y que es uno de los motivos por lo que estoy muy al tanto de los cursos de formación de INTEF.

A lo largo de este curso he comenzado a utilizar herramientas como Prezi, Symbaloo, los Lesson Plans de Symbaloo (aunque estos me resultan complicados integrarlos en mis clases), Genial.ly, he recuperado Wordle, y lo mejor, ClassDojo... Aún así tengo en la lista de pendiente Kahoot y GoNoodle.

Para mejorar mi competencia digital, el punto más flojo que tengo es el de trabajo colaborativo. Conozco alguna plataforma, y les he echado un vistazo, pero apenas las uso, alguna que en concreto no recuerdo ni el nombre, porque no era para nada intuitiva y no conseguí encontrar absolutamente nada útil, ¡y seguro que lo había! pero es que no conseguí entrar en las actividades. En fin, fue algo que me creó un complejo y lo que me hizo ver que con estas herramientas en nada, te quedas atrás.

Los recursos que más utilizo son los vídeos y canciones disponibles en la web, además de programas de gestión: symbaloo y dropbox, no puedo vivir ni ellos, me han arreglado la manera de organizar la información. Invertimos mucho tiempo en encontrar recursos adecuados para nuestras clases y no estamos como para perderlos. Además de la pizarra digital. Solo había tenido pizarra digital interactiva durante un curso y por falta de tiempo, no pude sacarle nada de provecho. Este año me propuse que no fuera así, y no puedo estar un día sin utilizarla. El ClassDojo es una aplicación que motiva a los niños desde el minuto 1, solo con ver los avatares que la web les proporciona y que ellos pueden crear y/o modificar están encantados. Además de ser una sencilla manera de proponer una economía de fichas y una gran forma de comunicación con los padres sobre la evolución y el trabajo diario de sus hijos.

Por último, decir que hoy mismo me ha llegado un correo con la información de EDUPILLS y no he dudado ni un minuto en instalarla. Le he echado un vistazo rápido y qué puedo decir... ya tengo pildoritas formativas para mis viajes en metro. Me ha encantado.

lunes, 6 de febrero de 2017

PMV: Busco socios.

Busco socios para el proyecto que os detallo aquí.

Está enfocado para alumnos de 1º de primaria de un colegio bilingüe del centro de Madrid. Me gustaría que al final de la unidad, los alumnos fueran capaces de representar en grupo una pequeña escena relacionada con los animales y sus emociones. Como ya mencioné en una entrada anterior, la conexión con el currículo está clara puesto que se incluye en el Decreto 89/2014 de la Comunidad de Madrid. La temporalización sería en el tercer trimestre, en la primera quincena de mayo. Creo que el resto de la información la tenéis disponible en el prezi. Pero si hay dudas, adelante, la sección de comentarios está disponible y también en twitter en @mrswondercroft.

jueves, 2 de febrero de 2017

Reflexión: mi práctica cooperativa

Aunque he leído varios documentos divulgativos sobre Aprendizaje Cooperativo, apenas he puesto en práctica las posibilidades de esta metodología.

En este curso he comenzado con la metodología CLIL o AICLE en un centro que me da la oportunidad de trabajar sin libros, lo cual me permite poner en práctica aquello que he ido aprendiendo en este tiempo. Para mí en la actualidad, uno de los objetivos primordiales es que los alumnos aprendan a leer y escribir en español y después en inglés, por lo que desde mis materias en inglés colaboro con esta idea poquito a poco para que los alumnos no se confundan y quitarles poco a poco el miedo a leer y escribir en una lengua que no se parece a la suya. En ocasiones, hay actividades que me permiten un aprendizaje colaborativo en tanto en cuanto, los estudiantes tienen que obtener una información de la que carecen pero que algunos de sus compañeros sí poseen para que puedan obtener los contenidos a trabajar. De momento, los alumnos comparten esta información relacionándose por parejas, pero más adelante, cuando la lectura y escritura esté más afianzada podremos trabajar en grupo.

En el curso pasado, sin embargo, trabajaba con alumnos de 6º en un colegio ordinario. Con ellos, la organización de la clase era de aprendizaje colaborativo, pudimos realizar algunas actividades sistemáticamente en cada unidad aplicando algunas de las técnicas del como la de "lapices al centro" o  "1-2-4".

Mi experiencia me dice que a los alumnos les gusta compartir e interactuar. En general, ayudarse y colaborar, sentir que son capaces de explicarse y transmitir ideas es muy motivador para ellos. Ayuda a fomentar lazos entre los estudiantes y les enseña a resolver conflictos de forma pacífica. Creo que la sociedad demanda colaboración y entendimiento y tenemos que enseñarles a los chavales como comprenderse y respetarse los unos a los otros, cada uno con sus cualidades.

La gran dificultad con la que me encuentro (y creo que no seré la única) es la de que a nosotros nadie nos ha enseñado eso, somos unos cuantos los que vamos tirando del carro de la colaboración en los centros en los que aún hay mucha gente (y la edad es indiferente) que entiende el trabajo de manera individual, incluso competitiva. Si no somos nosotros capaces de trabajar en equipo, dudo mucho que seamos capaces de enseñarlo.

Por fortuna, están este tipo de oportunidades como los MOOC de Intef para poder practicar un poco. ¡Vamos a por ello!